Historias de éxito

Un caso de cultura

November Edition 2020

Soft Gel Technologies convierte su sólida cultura en una verdadera potencia capaz de superar cualquier desafío. La mayoría de los clientes de Redzone hablan de los cambios significativos en su cultura tras iniciar su camino con Redzone, pero ¿qué ocurre con aquellos que ya contaban con una cultura sólida y enfocada en el trabajo en equipo? En Soft Gel Technologies, ganador del premio al Equipo del Año de la Costa Oeste de Redzone en 2019, Redzone fortaleció la cultura de colaboración que ya era estrecha y aceleró su madurez como una máquina de mejora continua.

“Soft Gel es un fabricante especializado en cápsulas de gel blando y cápsulas rellenas de líquidos; somos especialistas en fórmulas difíciles de encapsular”. Comenta Steve Holtby, presidente y director ejecutivo de Soft Gel. “Nos especializamos en desarrollar productos únicos en el mercado que son difíciles de encapsular para otros fabricantes. Contamos con equipos altamente especializados y un equipo técnico experto capaz de hacer lo que otros ni siquiera se atreven a intentar. Realizamos muchas producciones pequeñas y a medida, y nos centramos en aportar valor en lugar de competir por precios”.

“Cuando Redzone llegó, ya teníamos una cultura muy sólida”, añade Steve. “Pero algo que siempre les digo a otros directores ejecutivos que nos visitan es que, al permitir a cada colaborador expresarse —y ver que lo hacen—, les damos sentido de pertenencia. Una vez que sienten ese sentido de pertenencia y ven que sus ideas y sugerencias se incorporan, surge el orgullo. Y cuando hay orgullo, todo lo demás se vuelve fácil”. Steve continuó diciendo, con un auténtico orgullo reflejado en su rostro por su equipo: “Cuando las personas sienten orgullo por lo que hacen, su trabajo deja de ser solo un turno de 9 a 5 o una rutina nocturna. Revisan los números y se unen como equipo, y el crecimiento se vuelve exponencial, tanto en términos de negocio como en el desarrollo de las personas”.

Consolidación en equipo

Soft Gel ya había logrado superar los silos tradicionales que suelen formarse en empresas maduras, lo que se refleja en una permanencia de diez años, superior al promedio, entre sus 120 empleados. Al descubrir el Sistema de Producción de Redzone, se abrieron oportunidades de mejora que quizá antes no eran evidentes para el equipo. Al revisar su trayectoria, ya habían abordado las oportunidades más evidentes y no creían que quedaran grandes márgenes para avanzar. Cuando el equipo comenzó a adoptar una mejor comunicación y los datos disponibles para analizar y respaldar la toma de decisiones, surgieron resultados inesperados.

Valentino Lascano, gerente de planta, continuó: “Creo que mucho tiene que ver con cómo lo hacemos. “Cuando describo a Soft Gel, digo que la razón por la que somos capaces de asumir los desafíos que enfrentamos, los materiales difíciles de encapsular, es por el trabajo en equipo. Es por la experiencia. Es por eso que tenemos una baja rotación de personal”.

“Es gracias a las personas que llevan más tiempo aquí que hemos logrado consolidarnos como equipo. Sabemos qué podemos esperar el uno del otro. Sabemos cuáles son nuestros roles y responsabilidades, y los llevamos a cabo de la mejor manera posible. Por eso creo que, cuando enfrentamos un desafío o sabemos que se avecina una fecha límite complicada o algo similar, nos unimos y logramos hacer milagros”.

Supervisores de excelencia

Y Val no está solo. De hecho, se ha rodeado de un sólido equipo de supervisores que han ascendido desde la línea de producción, comenzando como esparcidores y creciendo hasta convertirse en supervisores.

Isaac Pitones es supervisor de producción y lleva 13 años en Soft Gel. “He visto una gran diferencia desde que comencé aquí”. Comenta. “Por alguna razón, los supervisores con los que trabajé eran muy territoriales y no permitían que un equipo entrara en el área de otro. Cuando me ascendieron, dije: ‘No quiero ser así. Quiero escuchar a cada miembro del equipo’”.

“Cuando comencé a recibir más datos para entender los desafíos que enfrentábamos con productos complicados, empecé a ver oportunidades para mejorarlos. Hablaba con mi equipo y les decía: ‘Oigan, hagamos esto o aquello. Trabajémoslo juntos.’ Usábamos los datos como respaldo para nuestras ideas y colaborábamos con el equipo de investigación y desarrollo para optimizar nuestros procesos”.

Anthony Allman es supervisor de encapsulación y su primer empleo fue en Soft Gel, que considera como su segundo hogar. Anthony explica: “Aquí aprendí a trabajar. Aquí fue donde fui ascendiendo hasta llegar a la supervisión. Y he visto cómo ha cambiado la empresa. Por ejemplo, cuando llegó Redzone, empecé a sentir que había más confianza en nosotros, los supervisores de primera línea, para tomar decisiones”.

Anthony añade: “Redzone en serio nos ayudó a ahondar y encontrar soluciones a problemas más complejos. Siempre estábamos ‘intentando esto o aquello,’ pero ahora podemos ponerlo a prueba. Podemos probar las ideas de todos para ver cuáles funcionan mejor. Aprendí a confiar en la idea de los operadores porque ahora podemos seguir los resultados. Ahora, a nadie le importa de quién fue la idea; encontramos la manera de mejorarla juntos. Esto fue un cambio enorme en comparación a los primeros días que describió Isaac, cuando solo ‘hacíamos lo que el supervisor nos decía que hiciéramos’”.

Isaac continúa: “Y lo mejor es que esa dinámica de equipo se extiende hasta los operadores. Jose Casas, que es líder en el área de mezclado, tomó la iniciativa desde que comenzó Redzone para mostrarle a su equipo, e incluso a otros turnos, que ‘así es como se hace’”.

Redzone en serio nos ayudó a ahondar y encontrar soluciones a problemas más complejos. Siempre estábamos ‘intentando esto o aquello,’ pero ahora podemos ponerlo a prueba. Podemos probar las ideas de todos para ver cuáles funcionan mejor.

Valentino interviene diciendo: “Tomen a Luis Navarro como ejemplo. Evitaba hacer las “rondas de médicos” con el iPad. Algunos compañeros más jóvenes, como Danny e Iván, notaron que estaba omitiendo algunas de sus verificaciones, así que empezaron a acompañarlo y le mostraron cómo hacerlo. Después de una o dos semanas, él se sentía cada vez más cómodo, porque se aseguraron de que se sintiera bien con el proceso”.

Anthony añade: “Esto es algo emotivo para mí, pero cuando llegó el COVID ninguno en mi equipo quería venir a trabajar. Tenían miedo. Intenté mantenerme firme, pero yo también estaba estresado. Entonces mi líder, Héctor Escobar, se acercó y me dijo: ‘Mira, te voy a ser honesto. Yo tampoco quiero trabajar. Pero si tú te quedas, me quedo contigo.’ Eso me impactó; fuimos a hablar con todos y logramos calmar al equipo. Ese día eso fue un milagro para mí”.

Y esa cultura profunda de equipo se mantiene en todos los niveles de la empresa. Anthony añade: “Antes solía guardarme mis problemas porque no quería molestar a los gerentes, pero ahora que tenemos comunicación en Redzone y todos pueden ver lo que ocurre, he aprendido que los gerentes y los líderes en verdad se preocupan por lo que hacemos y quieren ayudar. Nos brindan un apoyo genuino y eso fue un gran cambio para mí a nivel personal”.

Steve comenta: “Y creo que la razón por la que todo esto funciona se debe en parte a la cultura que ya habíamos construido y la confianza con nuestros empleados”. Redzone nos ayudó a llevar nuestra cultura a otro nivel, pero implementar un sistema que genera tanta visibilidad puede generar temor. Y todos lo reconocimos al inicio. Pero al trabajar juntos para superar eso, el equipo adoptó el sistema y notó que: ‘todos estamos trabajando para que sea mejor para todos.’ Esto fue posible porque la cultura de la empresa ya había demostrado que nos importa nuestra gente”.

Con la vista en el premio

¿Es de sorprender que, con una cultura así, hayan ganado el premio al Equipo del Año de Redzone en 2019? A pesar de que el negocio ya operaba bien, lograron un aumento del 48% en productividad en sus primeros 90 días y han seguido sumando más logros en cumplimiento (10%) y mantenimiento (más del 10%).

Cuando se le preguntó al equipo sobre cómo se sintieron al ganar el premio, Valentino recordó lo que sintió en los días previos a la nominación. “Habíamos visto a otras empresas llevarse ese premio y recibir ese tipo de reconocimiento; era genial ver que lo lograban. Pero nos preguntábamos: ‘¿Por qué no obtuvimos el reconocimiento? ‘¿Qué necesitamos para lograrlo nosotros?’, porque sabíamos que teníamos un equipo capaz de ganar. Así que dijimos: ‘¡2019 va a ser nuestro año!’ y enfocamos todos nuestros esfuerzos en ese objetivo”.

Valentino continúa: “Ese fue nuestro enfoque único porque nos dimos cuenta de lo lejos que habíamos llegado. Habíamos hecho tanto. Éramos tan diferentes de lo que habíamos sido en años anteriores que, más que quererlo para mí, lo quería para nosotros. Era para todos nosotros ¡y lo logramos!”.

Isaac añade: “Tengo que decir que los equipos de primera línea estaban muy felices. Todos gritaban y celebraban. Fue increíble, de verdad. Súper increíble”.

“Solo veía sonrisas”, añade Anthony. “Sin duda, eso trajo orgullo y alegría a la empresa”. Por supuesto”.

Tengo que decir que los equipos de primera línea estaban muy felices. Todos gritaban y celebraban. Así que, fue increíble, de verdad. Súper increíble.

“Es fácil pensar, ‘Bueno, ganamos el premio. ¿Y ahora qué?’”, dice Steve. “Pero ahora es ‘¿cómo logramos eso? Miren lo que ahorramos. Miren lo que hicimos.’ Y ahí es donde el premio refuerza aún más el reconocimiento que tenemos por el equipo”.

Entonces, ¿qué sigue para Soft Gel? Steve nos prepara el panorama: “Ahora el COVID nos ha traído mucho más proyectos, pero no hemos tenido que contratar a una gran cantidad de personal nuevo”.

“¿Por qué? “Porque el equipo ha encontrado formas de ser más eficiente, lo que nos permite aprovechar eso y decir: ‘Bien, ahora la empresa puede ser más sólida a medida que avanzamos, sin necesidad de invertir más, ya que tenemos personas que han puesto todo su esfuerzo y ya han hecho que el proceso sea lo más eficiente posible’”.

Valentino añade: “Seguimos encontrando oportunidades. Por eso seguimos en el recorrido de Redzone con los módulos de Mejora Continua. Parece un proceso sin fin, ya que, al estar siempre en busca de mejoras, eso por sí solo nos impulsa a querer superarnos constantemente. “Entonces, con acciones que respaldan esa mentalidad, las oportunidades no se agotan. Para ser honesto, eso es lo que me entusiasma. Son las posibilidades. Es como si quedara mucho más por descubrir porque aún no hemos aprovechado al máximo todo nuestro potencial. Redzone en verdad nos ha ayudado a ver esas posibilidades”.

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