Manos a la obra en Marianna Beauty

Planta galardonada en la primera línea del COVID, Marianna Beauty se lleva la victoria. Para la mayoría de las empresas, dar un giro a la cultura; alinear los equipos de Producción, Mantenimiento y Calidad; y transformar la planta en una potencia de productividad ganadora de premios tomaría años. ¡Marianna Beauty tardó solo 12 meses!

Y aunque nadie podría haber previsto la pandemia mundial que golpeó en marzo, el cambio cultural resultante permitió a Marianna dar un giro a todo su negocio en solo 3 semanas. La agilidad permitió al equipo cambiar la producción de champús y acondicionadores a desinfectantes y jabones de manos… manteniendo el flujo de pedidos y ayudando a que los productos esenciales lleguen a las manos del consumidor estadounidense.

Esta es una historia de ingenio estadounidense que solo podría suceder con su actitud de «todas las manos a la obra».

El recién ascendido Director de Operaciones, Cory Jensen, había escalado en la organización, trabajando en una cultura «agotadora» que enfrentaba una rotación de personal del 400% y dependía de un 50% de trabajadores temporales. Cuando vio los resultados de una encuesta sobre el compromiso de los empleados, Cory supo que algo debía cambiar. Sabía que el software tradicional de la planta de producción no iba a marcar la diferencia. Debía hacer que la gente pensara e interactuara de manera diferente en la primera línea. «Para nosotros, el objetivo era darles voz a las personas en la planta y luego cumplir con acciones».

Había oído hablar de una nueva generación de software a través de un contacto de la industria, y parecía haber marcado una gran diferencia rápidamente. Cuanta más gente preguntaba, más se repetía la misma historia: conectar a las personas parecía estar dando resultados; aumentaba la cooperación y la resolución de problemas en primera línea y cambiaba actitudes que las personas habían mantenido durante años.

Así que le dieron a los equipos «una voz» que conectaba a todos con todos a través de la plataforma Redzone y todo el equipo de la planta se involucró completamente. Los equipos de primera línea comenzaron a usar los foros, chats y tableros de acción sin capacitación y pronto las conversaciones se convirtieron en colaboración para hacer mejor el trabajo, superando problemas inesperados del día a día. La información que había sido «general» en el pasado, rápidamente se convirtió en «específica» para los obstáculos en cualquier área con la que estuvieran lidiando. Fluyeron los comentarios y la retroalimentación; los volúmenes de producción aumentaron de inmediato; y la mayor sorpresa fue que esto provenía de los propios equipos de primera línea.

Desde el equipo de producción hasta el de calidad, pasando por el de mantenimiento, esa comunicación encendió una chispa en cada individuo y se extendió como un incendio forestal. Comenzó con Productividad, pero lo mismo sucedió con Cumplimiento; cuando una línea lo conseguía, la siguiente línea también lo quería para poder competir entre sí y ser reconocidos. Y una vez que todo el mundo se conectó con Mantenimiento, se abrieron las puertas y todo el mundo se puso en marcha para «alcanzar el éxito». Poco a poco, los propios empleados de Marianna crearon la cultura que se convirtió en una bola de nieve de resultados milagrosos.

Personas como Tiffany, la Supervisora de Inspección de Calidad, cuyo papel se transformó de administración y auditoría a liderar y capacitar al equipo de primera línea para un entorno más seguro y más conforme. «Es mucho más fácil», dice. «Eliminó todo el papeleo, redujo los pasos manuales y cambió mi rol y la forma en que interactúo con las personas en la planta y, como resultado, todos tienen más responsabilidad».

Personas como Mike Bevar, que pasó de ser un operador de línea a técnico de mantenimiento y lideró la integración de la limpieza, la inspección y la lubricación en las actividades diarias del operador. «Lo que más me ha sorprendido es cuánto más comprometidos están los operadores con el equipo ahora. En caso de un problema con el equipo, siempre tenemos una conversación sobre por qué».

Cory agregó: «Comencé a ver cuánto más lejos y más rápido podemos ir, cuando esta nueva tecnología llega a las manos de los equipos que están al frente».

Personas como Durga, que es de Nepal y tuvo dificultades para transmitir sus ideas para que la gente las entendiera. Con un iPad en sus manos, ahora podía tomar fotos del equipo, dibujar sus ideas y traducir sus palabras a los idiomas que otros en el equipo (algunos que no hablaban inglés como lengua materna) podían entender.

Sus ideas se pusieron en práctica, llegaron al foro diario a través de Redzone y se trabajó en ellas sin dudarlo.

Si la idea parecía «correcta» y todo el mundo la analizaba a la mañana siguiente en la misma reunión, de algún modo las dudas habituales, subiendo y bajando por las cadenas de mando, parecían disolverse. El equipo simplemente arregló cosas, el trabajo mejoró y la voluntad colectiva del equipo pareció tomar el control. Esta herramienta literalmente catapultó la contribución de Durga a otro nivel para ayudar al equipo a «alcanzar el éxito».

¡Lo hicieron! Marianna Beauty ganó el Premio a la Productividad del Año 2019 de Redzone debido a sus fenomenales aumentos de productividad. Cory cita con orgullo su aumento de la productividad del 50% en los primeros 90 días y el equipo siguió obteniendo un aumento del 93% en los próximos meses.

El Director general Mike Cate comparte sus pensamientos: «Quiero que nuestra gente sepa que somos ganadores y que somos ganadores no solo porque obtuvimos un premio, sino por el esfuerzo y la energía aplicados para obtener ese premio», dijo. «Lo que me emocionó mucho fue ver las ganancias financieras reales que surgieron como resultado del trabajo que Cory y el equipo hicieron. Me facilita el trabajo, entregar un 40% más de volumen con las mismas personas o menos. Creo en la entrega de presupuestos gracias a las personas, no a costa de las personas».

Y Marianna ha recompensado el desempeño de su gente con aumentos de sueldo y oportunidades de ascenso. «Debes reinvertir en las personas que te llevan a casa», dice Mike. «Es un cambio increíble», reconoce Cory, quien describe: «Pasamos de una situación en la que pensábamos que nos faltaba talento, a una en la que tenemos una «cartera» completa de líderes emergentes desde la planta de producción».

Cory y Mike no son los únicos que están orgullosos. Como dijo Mike: «Puedes apostar que todos los miembros del equipo de nuestra empresa sabían que habíamos ganado ese premio». Solo pregúntale al Supervisor de Producción, Jamahl, quien dijo: «Me sentí reconocido y muy orgulloso de nuestro equipo, los esfuerzos de toda la empresa se habían notado y éramos dignos de ganar un premio entre todas las empresas que tienen Redzone».

Y de la jefa de línea Becca: «Me sentí increíblemente orgullosa de ser parte de una empresa que ganó un premio, realmente sentí que logramos algo como equipo. ¡También fue divertido tener una celebración de la empresa con comida en toda la planta!»

Me sentí increíblemente orgullosa de ser parte de una empresa que ganó un premio, realmente sentí que logramos algo como equipo. ¡También fue divertido tener una celebración de la empresa con comida en toda la planta!

En marzo de 2020 ocurrió lo impensable. El coronavirus sumió al mundo en una pandemia global. Al igual que muchos negocios ajenos a la producción directa de alimentos, todo se convirtió en cuestión de supervivencia. Y aunque el mundo todavía necesitaba champús y acondicionadores (aunque en volúmenes reducidos), tres de los cuatro segmentos principales de Marianna básicamente desaparecieron de la noche a la mañana. Su mayor cliente cerró el 98% de sus operaciones, el negocio de distribución de las escuelas de cosmetología cerró, la distribución de productos a través de salones de belleza y uñas simplemente se detuvo.

En cuestión de tres semanas, Cory y los equipos de operaciones conectados lograron destinar el 75% de su producción a desinfectantes y jabones de manos. ¡Tres semanas! En palabras de Mike: «Si no hubiéramos tenido la capacidad de adaptarnos rápidamente, no estoy seguro de que estas puertas estuvieran abiertas ahora mismo. Nuestros nuevos procesos de negocio nos permitieron dar ese giro, mantener a las personas seguras a través del proceso de comunicación, pero también seguir siendo productivos. Cory ha asumido un verdadero rol de liderazgo», dice Mike, «realmente impulsó las cosas al nivel de la planta, creó empoderamiento y alineó al equipo de manera que garantizó nuestra responsabilidad y aseguró nuestro éxito».

Hoy, las operaciones de Marianna están prosperando a pesar del COVID-19. Gracias a este enfoque de «manos a la obra» (con un suministro ilimitado de jabón y desinfectante), están vendiendo todo el producto que pueden producir y sus equipos se han adaptado a la nueva normalidad de mascarillas y distanciamiento social en primera línea. De hecho, como muestra la foto de portada, están bastante a la moda con sus mascarillas, muchas de ellas producidas por empleados.